José Luis López Vázquez

Sobre el perfil

Hay una especie de disociación traumática en la mayoría de los actores que han alcanzado popularidad gracias a la comedia pero están empeñados en que podrían haber sido grandes trágicos. En casos notables como el de José Luis López Vázquez han sido capaces no sólo de compatibilizar ambas trayectorias si no que han logrado integrarlas en la misma interpretación. El Rodolfo de El pisito, el Quintanilla de Plácido, el Juanito de El monosabio conjugan ambos registros. El Galindo de Atraco a las tres puede ser uno de los ejemplos memorables de una interpretación cómica en registro de sainete, como lo es el “padrino búfalo” de La gran familia. Al mismo tiempo, José Luis López Vázquez es uno de los actores mejores pagados de la década de los sesenta. La veintena de títulos dirigidos por Mariano Ozores e interpretados junto a Gracita Morales avalan su categoría de estrella y –según cuenta Ozores- el que ambos disfrutasen de las primeras roulottes que se veían en un rodaje español. Todas estas experiencias le sirven de preparación para -sin más que leves ajustes- meterse en la piel del trío de protagonistas abrumados por el peso del pasado en su trilogía con Saura-Azcona o la patética solterona de Mi querida señorita. El principio de la década de los setenta supone el reconocimiento crítico. Pese a ello, José Luis López Vázquez sigue conciliando papelitos secundarios, con colaboraciones de lujo y protagonistas absolutos. Como otros compañeros de generación durante los últimos años José Luis López Vázquez recala en la televisión como medio de vida y en el escenario como satisfacción profesional, espaciando sus intervenciones en cine pero a pesar de ello continuó siendo uno de los actores más eficaces del panorama cinematográfico español.

Fuente: DQVlapeli