A fábrica de nada (2017)

A fábrica de nada (Pedro Pinho, 2017)

A fábrica de nada tiene la ambición de ser una película total sobre el desmantelamiento de la industria en Europa. De ahí sus tres horas.

Por un lado, narra la historia de los trabajadores de una fábrica de ascensores desde el momento en que descubren que sus propietarios están llevándose la maquinaria con nocturnidad y alevosía hasta que deciden hacerse cargo de la producción mediante la autogestión. Por otra parte, traza el retrato de algunos de ellos y, en concreto, el de la pareja formada por José Smith Vargas y Carla Galvão, y el hijo pequeño de ésta, y cómo el proceso afecta a su relación personal. Pero también hace suyo metraje documental sobre paisajes postindustriales, entrevistas con trabajadores despedidos, discusiones en el seno de la izquierda tradicional sobre la evolución del capitalismo, momentos docudramáticos en el seno de debates asamblearios e, incluso, números interpretados por actores naturales de un autodenominado "musical neorrealista".

Entre Númax presenta... (Joaquín Jordá, 1980) e I compagni (Mario Monicelli, 1963), A fábrica de nada hace suyas también algunas propuestas de Uccellacci e uccellini (Pajaritos y pajarracos, Pier Paolo Pasolini, 1964) y del cine del antithatcherismo, con la sana intención de estimular el debate sobre la viabilidad de una salida digna para los trabajadores en plena crisis del capitalismo tradicional y, por ende, de la lucha de clases.