Liberxina 90 (1970)

Liberxina 90 (Carlos Durán, 1970)

Romy (Romy) y Luiz (William Pirie) se encuentran en una playa de Varlenia donde un hombre acaba de ser ametrallado por la policía. El fallecido pertenece a un grupo liderado por Doc (Edward Meeks), quien para hacer saber a Luiz que ha llegado a Varlenia se dedica a destruir con un pico los televisores que emiten el noticiario oficial. A consecuencia de esta acción Doc es ingresado en un psiquiátrico, de donde lo rescatan Luiz y Romy. En casa de ésta se encuentran con Sandra (Serena Vergano), resposable de una central de gas en la que podría vertirse la dosis de Liberxina que el fallecido entregó a Romy antes de morir. Liberados los ciudadanos de su neurosis social gracias a esta droga, los miembros del comando aprovecharían para llevar a acabo una revolución de efectos irreversibles. Pero Sandra está cansada de luchar.

El terremoto de mayo de 1968 han producido un cambio profundo en la Escuela de Barcelona. El hedonismo da paso a un lirismo nihilista en el caso de Jacinto Esteva y al compromiso político en el de Carlos Durán. Es una maniobra afín a la que ha emprendido Jean-Luc Godard, pero también emparentada con la contemporánea Ice (Robert Kramer, 1970).