índice del sitio
Inicio | Películas contadas | Perfiles | Canon | Blog | Sobre DQVlapeli | Contacto | Política de la comunidad | Aviso legal© 2024 Dequevalapeli.com
Marlene tiene un número de variedades que causa sensación en Madrid: baila desnuda en una jaula llena de leones.
GÉNERO: Circo,Drama
Carne de fieras (Armand Guerra, 1936)
Geroges Marck habría mostrado al reportero Rafael Martínez Gandía su cuerpo cruzado de cicatrices en el número de la revista Crónica del 26 de junio de 1936, poco antes del golpe militar. Sin embargo, a los lectores las cicatrices del domador les importaban bien poco. Lo que querían ver retratado era el cuerpo de la “Venus rubia”. Un reportaje de titulado “La emocionante danza de Marlene Grey en la jaula de las fieras” nos sorprende con la noticia de que Marlene Grey estaba casada con uno de los actores que tenía encomendado un papel menor en Carne de fieras. Se trata de Jack Sidney que se presentaba en los mismos espectáculos de variedades de su señora como “el hombre autómata”. A mediados de junio de 1936 se habían presentado en el Circo Price. Tres semanas después hace dos pases por noche con “éxito creciente” en el Teatro Maravillas. El precio del espectáculo era en ambos casos de una peseta. Los pases duraban 40 minutos.
El número se publicitó con grandes fotos de la estrella desnuda adheridas a los laterales de un coche que circulaba por la Gran Vía y la calle Alcalá. Seguramente fue éste el motivo por el que Arturo Carballo, el empresario del cine Doré, decidió contratarla para protagonizar una película. El rodaje [...] comenzó en fecha tan desafortunada como lo fue el 16 de julio de 1936.
El 23 de agosto, antes de poder regresar a Francia, Marlene Grey y los leones de Georges Marck actuaron en un festival pro-heridos de guerra organizado por la CNT en la Plaza de Toros de Madrid. Se anuncian también su compañera de reparto Tina de Jarque, la vedette Laura Pinillos, la cupletista cómica Amalia de Isaura, los caricatos Lepe y Alady, el cantante Angelillo, la Shirley Temple española y el negro Aquilino. Del “hombre autómata” no hemos encontrado rastro.