800 balas (2002)

800 balas (Álex de la Iglesia, 2002)

800 balas es la película más spielbergiana de Álex de la Iglesía, al menos, en su inicio. El niño (Luis Castro), Carlos, en un chalet modernísimo y sin alma, fascinado por la figura de su padre fallecido y su abuelo ausente (Sancho Gracia), JUlián,.apuntan en esta dirección. Claro, que esta fascinación es la misma que siente el abuelo por el pasado, un tiempo mítico en el que la vida era puro disfrute y cuyo epitafio fue la muerte de su hijo, el padre de Carlos, en una caída de la cual Julián siempre se ha sentido culpable. Esto le ha llevado a vivir en el poblado de Oeste construido en Almería donde en los buenos tiempos se rodaban las películas. Julián es un especialista que sobrevive con un espectáculo patético opara turistas en el que le acompañan el pistolero envidioso (Ángel de Andrés López), el vaquero al que arrastra el caballo (Enrique Martínez), el que se cae desde lo alto del edificio del saloon (Carlos Tallafé), el enterrador (Luciano federico), el ahorcado del que todo el mundo se olvida una vez acabado el espectáculo (Eduardo Gómez) y la chica de saloon con un corazón de oro (Yoima Valdés). En el bando opuesto están las fuerzas del orden, los representantes del poder económico y la familia. Así, tal cual, como instituciones. Nada más y nada menos.