Casi un caballero (1964)

Casi un caballero (José María Forqué, 1964)

Casi un caballero  es la adaptación de una obra teatral al servicio de aquella pareja de hecho, auspiciada por Masó como productor, que fueron Alberto Closas y José Luis López Vázquez. Lo curioso es que la comedia de Carlos Llopis -¿De acuerdo, Susana?- había servido en 1955 de carta de presentación en su tierra a un Alberto Closas que había salido de España cuando era adolescente a consecuencia del cargo que su padre ocupaba en la España republicana y que López Vázquez ejerció entonces de escenógrafo, labor que compaginaba con sus intentos de convertirse en actor. Concha Velasco pone su gracia sainetesca a un papel que en el escenario había compuesto Mari Carmen Díaz de Mendoza. Ella es una ladrona de no demasiados vuelos, asistida por dos delincuentes chapuceros (López Vázquez y Landa), que termina enamorándose de un ladrón de guante blanco y modales refinados (Closas). Forqué ya había probado esta misma línea de comedia teatral de corte policíaco en Usted puede ser un asesino (1961).