Queridísimos verdugos (1977)

Queridísimos verdugos (Basilio Martín Patino, 1977)

Película brutal hasta lo doloroso. Frente al sentimentalismo de algunos momentos de Canciones para después de una guerra -que Martín Patino salva siempre gracias a la ironía- Queridísimos verdugos se limita a poner un espejo ante la sociedad del momento. Los tres "administradores de la pena capital" en activo durante los últimos años del franquismo -Vicente Copete, Antonio López Sierra "El Corujo" y Bernardo Sánchez- se reúnen en una bodega, comen, beben y, poco a poco, se van soltando...

Queridísimos verdugos fue rodada clandestinamente en 1973 y presentada al público en 1977. Aunque el texto de partida es un reportaje de Daniel Sueiro sobre Los verdugos españoles (1972), Patino ya había colaborado a principios de la década anterior con César Fernández Ardavín y con su compañero en el Instituto de Investigaciones y Experiencias Cinemtográficas, Manolo Summers, en un guión sobre los ejecutores de la pena capital. Durante el proceso de documentación entrevistaron a Antonio López Sierra "El Corujo", cuyo apodo tomó el protagonista de un guión con algunas coincidencias con el de Azcona y Berlanga, presentado dos o tres años después. El libreto de Ardavín y sus colaboradores fue desestimado por la Censura en la primavera de 1960.